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La evolución de la firma: Del anillo del Rey a la Selfie

¡Marcimex a la vanguardia!

Los escribas eran hombres considerados eruditos por los antiguos egipcios, los únicos que sabían escribir y por tanto hombres de confianza de los faraones,  tenían mucho poder por su cercanía con ellos. Debido a que la realeza no sabía escribir, les fabricaron unos anillos grabados con la representación de sus nombres que permitía que el faraón pueda certificar la autenticidad de documentos escritos por sus escribas. Lo que se constituyó en la primera firma de la historia. 

Desde entonces hasta ahora el tema de asegurar la autenticidad de consentimientos escritos ha sido un reto que la humanidad ha enfrentado con diferentes enfoques. Los Notarios han sido por años los encargados de asegurar que la firma que consta en un  documento importante corresponda a quien se indica. Y lo han venido haciendo a través de la comparación visual del rostro de la persona que firma delante suyo con la foto que consta en algún documento de identificación oficial, cédula o pasaporte.

En épocas de transformación digital, en que la humanidad busca eliminar cualquier tipo de registro en papel; en que ya no se busca reducir los tiempos de espera, sino eliminarlos; en que el cliente espera poder realizar cualquier tipo de trámite desde la comodidad de su hogar sin necesidad de acudir presencialmente a un lugar; el reto de disponer de algún tipo de certificado que asegure que la persona ha dado su consentimiento es ahora mucho más grande.

Con el nuevo proceso de Firma Digital, Marcimex ha resuelto toda la problemática planteada. Todos los documentos que se generan al realizar una venta a crédito ahora son digitales; es decir, no se requieren imprimir en papel, solo son archivos de computadora. Nuestros clientes en lugar de tener que rubricar un documento pasan por un proceso muy rápido en el que luego de tomarse una selfie, programas computacionales que aplican inteligencia artificial realizan la comparación de su rostro con la foto que consta en el registro civil del Ecuador, esto permite certificar que es la persona que dice ser, sin siquiera la necesidad de que exista otra persona que lo revise. En el proceso queda grabado un pequeño video que puede servir como evidencia en caso de conflictos posteriores. Y al final se realiza el envío SMS a su teléfono de un código que permite al cliente dar su consentimiento para los documentos donde luego se estampa su firma digital.

Con todo esto, Marcimex ha mejorado la experiencia del cliente por la reducción del tiempo de firma de documentos en un 60%, además de que el proceso ahora se puede hacer de forma remota, sin necesidad de que los clientes acudan a nuestras tiendas, facilitando las ventas en línea. También se han reducido los costos de impresión tanto de insumos de impresora como de papel, y todo el tiempo que nuestros asesores tenían que invertir en la regulación, organización y envío de documentos ahora lo pueden aplicar en dar una mejor atención. 

Otro beneficio es la eliminación del espacio de almacenamiento que se necesitaba para guardar los documentos impresos así como los recursos requeridos para su administración, y la garantía de que no ha habido suplantación de identidad, y la documentación está completa y disponible de forma inmediata para su posterior uso en el momento en que se requiera.

Con esta innovación, Marcimex se convierte en la empresa que va a la cabeza de esta carrera por la transformación digital en el segmento, poniendo siempre a sus clientes en el centro de todos sus esfuerzos.